Marco Masini a Il Corriere della Sera: «Vuelvo a renacer con un canto al deseo de ser padre».
Marco Masini participará en el próximo Festival de Sanremo con L’uomo volante, una canción que trata la temática del deseo de ser padre. El 13 de abril de 2001 anunciaba su retirada de la música a causa de las estúpidas acusaciones de ser gafe. El 7 de octubre de 2003 sería la fecha señalada para su regreso al panorama musical, presentando un nuevo álbum titulado ..Il mio cammino. Por último, le llega su gran escaparate, Sanremo 2004. De los veintidós artistas participantes, él es el veterano. Debutó en Sanremo ’90, obteniendo el primer puesto en la categoría Nuove Proposte con Disperato. Un año más tarde, conseguiría alcanzar un meritorio tercer puesto con Perchè lo fai. Menos satisfactoria fue su experiencia en el Festival del año 2000, donde Raccontami di te tan solo logró la penúltima posición, resultando decimoquinta.
Masini, esta es una nueva oportunidad de revancha. Y siempre con temáticas… escabrosas.
Más que revancha es un renacimiento. En cuanto a la canción, con respecto a las otras que presenté al Festival, ésta es la menos melancólica y dramática. Perche lo fai era la historia de una chica que se drogaba. Esta es definitivamente más positiva. Parte de un deseo: es una carta a un niño que no existe pero al que deseo fuertemente y no sé si quiera si algún día nacerá.
¡Venga! En el umbral de los cuarenta aún tiene todo el tiempo del mundo…
Tienes razón. Esta canción es una especie de simulación: trato de explicar que se puede ser padre sin tener un hijo pero estando preparados para serlo. El hijo no es tanto la materialización física del ser humano sino que es algo que ya tienes dentro, un proyecto de iluminar su camino con tu experiencia; imaginas la compañía no sólo física sino también mental que le darás.
¿No se trata, entonces, de una canción acerca de la paternidad negada?
Más bien trata de uno de esos sueños tan fuertes que parecen reales. El protagonista habla a su hijo como si ya existiera. Esa es la clave de la canción.
Eres todo un veterano en el Festival de Sanremo. ¿Qué diferencias encuentras entre esta edición y las anteriores?
Nunca vi nada igual. La jornada de retiro de los participantes al Centro Europeo de Toscolano de Mogol ha sido divertida y muy útil. Nos hemos conocido, nos han explicado todo perfectamente, desde las escenografías al mecanismo del espectáculo y las reglas del certamen. Aunque lo mejor ha sido cuando Tony Renis se ha sentido el Trapattoni de la situación, vestido con camiseta, pantalones cortos y gorra rojinegra.
¿Esta situación es inédita?
Totalmente, sí. Me sentía como estar de gira con un grupo. En la jornada de retiro en Coverciano podíamos ir a la discoteca. Allí tocábamos formando varios grupos en una jam session. En resumen, nos hemos conocido todos, he hecho amistad con muchos chicos como Andrè y Linda que han crecido con mis canciones. Tony nos ha motivado al máximo y al final nos ha mostrado el escenario, la escenografía; nos ha presentado a los cámaras, a los técnicos, a todos, algo que nunca había pasado. Por ahora, hay un ambiente estupendo. Si se mantiene, será el Festival de los músicos, mientras que los otros festivales eran los de la pasarela, los de las modelos.
Ha vuelto a la música tras un periodo de silencio: ¿han vuelto los prejuicios sobre usted?
Algo del pasado siempre queda. Todavía quedan personas que siguen ancladas en la etiqueta de la mala suerte. Creo que es necesario algo más de tiempo. Pero depende sobre todo de mi comportamiento. Por mi parte, todo lo relativo a la mala suerte y al pasado lo he dejado atrás. He perdonado a todos. Ahora sólo es cuestión de hacer canciones que gusten a la gente.
¿Qué perspectivas tiene después del Festival de Sanremo?
Intentaremos relanzar mi carrera en Francia, donde una de mis canciones será banda sonora de una película.
Fuente: Il Corriere della Sera – Mario Luzzatto Fegiz