Uscita di sicurezza: tradición y mestizaje.
De los cinco discos realizados por Marco Masini en once años de carrera, Malinconoia del ’91 es el que más puede asemejarse a este nuevo producto, Uscita di sicurezza. De hecho, el mismo desencanto y mal humor que aglutina aquel vinilo es del que se alimenta este último trabajo discográfico: Vai male a scuola -por ejemplo- polemiza con el actual sistema de enseñanza; Figlio della polvere, trata el espinoso asunto del apadrinamiento, mientras que Trappole pone a todos los internautas en guardia ante los riesgos que un sistema de comunicación fascinante como internet puede generar.
El paso adelante que da Uscita di sicurezza -y que le hace distinguirse de sus anteriores trabajos publicados- se aprecia, por un lado, en los temas tratados (desde el amor en La danza della ragione hasta el tiempo en La clessidra), y -por otro- en el sonido, que ya desde la publicación de Scimmie en 1998 se presagiaba cierta revolución en el recorrido musical de Masini. Esta evolución sonora destaca en la versión de Nothing else matters -rebautizada como E chi se ne frega-, en las influencias trip-hop del primer sencillo Lasciaminonmilasciare, en el fantasma de CSI de Vivere liberamente o en la melodía estilo años ’70 contenida en la evocadora Sant’Elena, que parece haber sido prestada de la serie televisiva The persuaders.
No obstante -más allá del discurso musical- la lírica ha reencontrado una simplicidad que rechaza la vacuidad en favor de una comunicación más fluida entre el cantante y el oyente, conteniendo -al mismo tiempo- una lucidez de base que garantiza a la propia canción cierta credibilidad. Un trabajo que -en síntesis- supondrá un buen cimiento de cara a los próximos discos, y que nos hace constatar que la experiencia y la madurez pueden llegar a crear extrañas alquimias entre la música italiana y las influencias externas. Queda por ver si habrá una vuelta atrás o si se seguirá profundizando en el difícil camino del mestizaje.
Fuente: Kataweb – Donal Cantonetti