Marco Masini a Velvet Gossip: «Soy demasiado orgulloso para dar el primer paso a la hora de seducir».
Lo cierto es que sí: me encuentro entre los muchos adolescentes que han cantado las canciones de Marco Masini. Soy de aquellas que compraban sus cintas de cassette, que soltaban gorgoritos entre las cuatro paredes de mi habitación, que aún a día de hoy me lo recuerdan mis padres. Porque, en aquel momento, me encerraba en mi cuarto, convencida de que nadie -salvo Marco, naturalmente- podía entenderme. Mis cintas de música tenían las letras borradas de tanto escucharlas pero yo las habría reconocido entre miles de ellas. Estaba convencida de que, por algún increíble mecanismo del destino, Masini conocía mi historia y la convertía en canción. Precisamente mi historia. Cuántos, en Italia, habrán tenido la misma ilusión. Y continuarán alimentándola. Le revelé todo esto, antes de comenzar la entrevista. Él se rió y me dijo: «¡Hiciste bien!». No soy una campeona en originalidad, la verdad sea dicha. Habrá recibido tales revelaciones miles de veces. Bueno, dejémoslo.
El pasado sábado, cuando vi a Masini sentarse en el piano delante de las cámaras de I migliori anni de Rai Uno, entonando Ci vorrebbe il mare, me emocioné. No sólo por la ráfaga de recuerdos que me llegaron sino porque él había crecido (también). O cambiado. O crecido y cambiado. De todas formas: era la misma canción, la que he escuchado millones de veces y, aún así, era totalmente diferente. ¿Lo demás? Dieces y felicitaciones. Marco ha sido el vencedor del programa con la canción Cosa resterà degli anni Ottanta, por delante de Povia con Amico y por Karima con I will always love you.
Marco, una victoria casi anunciada: has estado en la primera posición en muchas galas.
Sí, pero por encima de la victoria, que importa poco en este contexto, estoy contento de haber podido vivir esta experiencia y de haberla podido compartir con Carlo Conti y con colegas de profesión que son, por encima de todo, amigos. Me he divertido muchísimo, he cantado canciones que me han hecho volver atrás en el tiempo. Ha sido bonito.
El 2 de abril se pone a la venta tu nuevo cd, La mia storia… piano e voce, una antología de tus grandes éxitos que incluye, además, dos temas inéditos. Más tarde, el 15 de abril, parte tu próxima gira de conciertos, en el Teatro Brancaccio de Roma. La gira será, preciso, sólo a piano y voz.
Es un nuevo desafío, una gira en perfecta soledad. También será un modo de comprender ciertos conceptos, que grité en su momento, y que serán transmitidos de un modo más apagado, con sonoridades más dulces y una atmósfera más íntima. En esta gira cuento mi historia personal: sin guión, sin nada pactado. Tan solo acompasándola con las canciones.
De estos conceptos que hablas, ¿cuál es el que consideras más importante?
Probablemente, el de la defensa de la propia dignidad, especialmente referido a ese tipo de amor que te ataca y te «mata». La defensa del alma pura.
¿Existen aún, en tu opinión, almas puras?
Bueno, nosotros nacemos puros. Luego la sociedad nos cambia…
Has hablado otras veces de las etiquetas que, en un momento de tu carrera, te impusieron. Sucedió en el culmen de tu carrera: ¿no crees que fueron fruto de la envidia?
No, lo descarto. Más que nada porque las etiquetas se ponen a todos: al camarero, a la vecina… a las personas, no a los personajes. Y luego, ya sabes, es más fácil hacerlo con alguien que tiene éxito. Hace mucho más ruido y es una cuestión de modas. Casi un estereotipo. Queda más guay así. ¿No existe siempre una tendencia a unirse a la mayoría? Aunque tú vendas un millón de copias, representas una parte minoritaria de la población de Italia. Es una cuestión de números.
De todos modos, lo llevaste bien.
Los verdaderos problemas son otros.
Eres soltero. En una reciente entrevista dijiste que si un hombre llega sin pareja a los cincuenta años, quiere decir que se ha equivocado en la vida: ¿no fuiste demasiado duro contigo mismo?
No, soy realista.
¿Pero no puede ser que se tratase de la persona equivocada?
Por eso, me equivoqué al elegir a la persona.
¿Y no puede ser, como ocurre frecuentemente, que esa persona al principio se pone una máscara?
En ese caso, error mío al no darme cuenta y no advertir la falsedad.
Ok, me rindo. ¿Qué características te atraen en una mujer?
No son características precisas, cada mujer captura la atención por motivos diferentes. Aprecio mucho la feminidad, que no todas tienen. Me gusta la elegancia, y por elegancia no me refiero a trajes de firma caros, sino en algo más innato… La finura en sus gestos, en sus modos. Y también es muy importante la simpatía: yo quiero reírme con una mujer, si no, no estoy a gusto.
¿Tú das el primer paso a la hora de seducir a una mujer? ¿Eres chapado a la antigua?
No, no doy el primer paso, por una cuestión de orgullo. Nunca lo he hecho. Nunca me he arriesgado a ser rechazado.
¿Seguro que se trata de orgullo y no de timidez?
Seguro. No me gusta «rebajarme», en cierto sentido; mostrarme el primero. Puedo mandar alguna señal, sí. Dar a entender que existe interés, quizás llevándolo al humor. Pero nunca doy el primer paso. Es lo mismo que a la hora de tocar a una mujer: nunca soy el primero, debe hacerlo ella antes…
Siempre has tratado el tema del amor, desde sus mil caras. ¿Hablas de él en las dos nuevas canciones inéditas?
Sí pero poniendo énfasis en el egoísmo. Hablo del amor que trata de buscar en el otro en base a deseos propios. El amor, en mi opinión, es una materia, mi materia preferida. He cantado historias personales pero también, y especialmente, las de los demás.
También tú eres muy activo en el mundo de las redes sociales. Es obvio que los motivos son principalmente profesionales pero ¿te sientes a gusto en ellas?
Bueno, creo que es algo que le gusta más a los que son más jóvenes que yo. Las cosas modernas me producen interés pero también me dan cierta nostalgia. Reconozco, no obstante, la importancia de la tecnología y admito que ya no podría vivir sin mi Iphone: es un instrumento muy útil.
¿Qué haces cada día, aparte del trabajo y la música?
La música y mi profesión ocupan la mayor parte de mi tiempo, especialmente en este momento: está a punto de salir el disco, de comenzar la gira. Por lo demás, trato de relajarme: me encanta pescar, ver el fútbol, estar con los amigos, leer, ver alguna buena película…
¿Pero te consideras solitario?
Sí, un poco sí. Como buen toscano, me gusta divertirme. Me gusta contar chistes, soltar chascarrillos… pero no soy una persona a la que le encante la fiesta y me gusta ser así, sin gastar las horas en las discotecas…
Fuente: Velvet Gossip – Nadine Solano
Fotografía: Kikapress