Masini a Ansa: «Quizás en el pasado debí haber comunicado de otra manera».
«Me arrepiento bien poco de las elecciones que tomé en el pasado, incluido mi retiro de la música en el 2001, que después reconsideré. Además, sería absurdo hacerlo puesto que ir al pasado es imposible. Pero mirando atrás, pienso que pude haberme explicado mejor en la elaboración de algunas letras, que habría podido haber abierto un poco más mi manera de comunicar». Marco Masini, de vuelta tras un Festival de Sanremo en el que ha logrado un sexto puesto con la canción Che giorno è, valorado positivamente por público y crítica, está listo para comenzar desde el 11 de abril en Mestre con una gira por teatros de toda Italia presentando su álbum antológico Cronologia, cuenta sus impresiones a la agencia de noticias ANSA.
Cronologia recorre también los inicios de su carrera, aquellos lejanos años ’90 donde nos regaló grandes satisfacciones con canciones como Disperato, Malinconoia, T’innamorerai o Vaffanculo, pero que le empujaron -marcado como depresivo y funesto- a la decisión, temporal, de dejarlo. «Los ’90 fueron años difíciles: los jóvenes se morían de miedo ante una sociedad que se partía en pedazos. Era difícil no gritar aquel miedo, aquella rabia. Quizás habría podido encontrar respuesta más convenientes, un lenguaje diferente, decir las mismas cosas con otras palabras». Sin embargo, el público no le abandonó, regalándole en 2004 la victoria en el festival de Sanremo con L’uomo volante. Y Sanremo tampocó le traicionó este año, donde regresó por séptima vez.
«El festival es siempre una nueva aventura -cuenta-. Y es verdad que allí estaba mi amigo Carlo Conti, pero lo que impulsó que yo estuviera allí de nuevo fue la canción que tenía. Sabía que era un tema fuerte, que valía. Y tenía razón: he sabido llegar a las nuevas generaciones: logré quedar por encima de los Dear Jack -bromea-. Esto me lleva a pensar que he emprendido una evolución musical que va en la dirección adecuada. Yo siempre estuve en el disparadero». Pero, ¿hacia dónde quiere llegar este nuevo Marco Masini, el artista que muda de piel, que no deja de estar quieto? «Los tiempos cambian, se crece, se madura, se cantan cosas diferentes. Se transforma -por fuerza- la fragilidad de la adolescencia en necesidad de vivir, disfrutando cada pequeño momento. Me gusta el pop y el objetivo es tratar de llegar a hacer buena música. He tratado de retomar la ola que me lleve al equilibrio artístico. No sé qué dirección tomará la música pero sé que debo prestar atención hacia dónde irá para estar allí; y trabajar es el único modo para lograr el consenso del público. Y también para lograr estar presente en las radios. Otro tipo de trucos son inútiles». Avanza -además- que toda su concentración actual pasa por su actual gira, postergando un hipotético nuevo álbum de temas inéditos para el futuro.
«El concierto está pensado para ser un viaje a través del tiempo. Desde las canciones de hoy a las del pasado, tratando de entender qué sucedió en el camino. Incluiré también canciones menos conocidas para tratar de entender si hoy podrían ser escuchadas de manera diferente al pasado. La dificultad consistirá en ofrecer un producto homogéneo, sin que los años ’90 suenen a prehistoria». Del pasado echa de menos sólo una cosa: «la figura del productor, que te explicaba cómo afrontar una canción, cómo cantarla. Hoy existen los coach de los reality shows pero no es lo mismo. Se necesitaría un grupo de trabajo para coger de la mano a los jóvenes para enseñarles a ser capaces de autoproducirse para no desaparecer una vez se esfume el efecto reality. Jovanotti, por ejemplo, es el artista que es porque tuvo detrás a Claudio Cecchetto».
Tras Mestre -el 11 de abril-, Masini estará el 16 en Roma; el 24 en Torino; el 30 en Montecatini Terme, el 11 de mayo en Milano; el 14 en Firenze; el 15 en Piacenza; el 18 en Napoli; el 20 en Brescia y el 24 en Cesena. «Para el verano estoy pensando en espacios abiertos un poco peculiares».