Marco Masini a Il Giornale Off: «En 2018 creo que estaré involucrado en un proyecto en el extranjero».
Desde el 30 de abril, Marco Masini acumula kilómetros: está recorriendo de arriba a abajo la península italiana con su Spostato di un Secondo Tour, que se dilatará en el tiempo durante los meses de verano. La gira de conciertos tiene el título de la canción con la que participó en el pasado Festival de Sanremo y que da nombre al último trabajo discográfico del cantautor, donde abraza nuevas influencias sonoras entre canciones enérgicas y emotivas baladas. A su legión de fans les hace escuchar las canciones de su nuevo disco pero también sus grandes éxitos: «Llevo en la mochila veintisiete años de música en el momento más irreflexivo del año. El verano es posiblemente la estación donde se piensa menos en la vida cotidiana y nos relajamos, aunque sea difícil porque este mundo no nos deja tranquilos en ningún momento. De todas formas, el verano regala emociones diferentes y poder acompañar esas emociones con mi música me hace sentirme feliz». Con estas palabras, Masini comienza la entrevista para Il Giornale Off.
¿Alguna vez has tenido miedo de subir al escenario?
Desde el punto de vista emotivo, no, estoy siempre tranquilo. Es mi profesión desde hace muchísimo tiempo, más allá de que sea mi gran pasión. Cuando haces algo que te permite compartir con los demás una gran emoción, no puedes hacer otra cosa que sentirte satisfecho.
La temática de tu nuevo disco es la relectura sin nostalgia del tiempo transcurrido. ¿Nunca has sentido nostalgia de algún momento de tu vida?
Principalmente de los momentos de la infancia, cuando aún vivía mi madre y toda la vida estaba por decidir. Cuando llegas a los cincuenta y tres años, la vida se va acortando y los recuerdos te llevan a momentos de irreflexión e inconsciencia y a situaciones de grandes satisfacciones y batallas difíciles de vencer.
Hablando de infancia, ¿cómo eras de niño?
Siempre tuve el sueño de componer, de crear sonidos y colores dentro de la música. Nunca llegué a concentrarme realmente en los estudios, en la escuela. Desde muy pequeño ya entendí cuál era mi objetivo, que siempre traté de alcanzar con dedicación y en silencio, sin grandes proclamas, sino tratando de compartir mis emociones con los demás.
En las radios estamos escuchando Tu non esisti, canción que muestra al hombre cuando es dejado por la pareja, temática ya afrontada en la famosa Bella stronza pero con mayor madurez. ¿Es diferente hablar de amor a tu edad?
Es siempre igual porque el amor es siempre nuevo. Te captura a cualquier edad y siempre te regala emociones bonitas que compartir. Se habla de instinto tanto a mi edad como a los veinte años, ya que es necesario que seamos sinceros para poder explorar la realidad de manera íntegra.
El álbum también habla de actualidad: la letra de Nel tempo in cui sono tenuto a restare muestra la problemática de las inundaciones. ¿Qué no termina de funcionar en Italia?
No funciona nada cuando no hay transparencia ni verdad. Esto es extensible tanto en una relación de pareja o de amistad, como en el funcionamiento de un país.
¿Sigues la actualidad política?
La seguía más cuando era joven. Después, como sucede con muchas cosas confusas, vas tomando distancia.
¿Qué te apasiona, aparte de la música?
El fútbol y la astrofísica. He leído muchos libros de Stephen Hawking.
No sé si ya te lo han ofrecido pero, ¿serías jurado de un concurso de talentos?
Nunca me lo han propuesto, cuando surja la posibilidad, lo valoraré. De todas formas, no me siento nadie para poder juzgar el trabajo de otros. Creo que es algo sumamente difícil y que el mejor juez es el público.
En el año 2001 te retiraste de los escenarios. ¿Cuánto te costo volver?
La música te da la oportunidad de vivir la vida plenamente porque, cuando llegas a la cima, tardas muy poco en bajar y cuando bajas, tienes de nuevo el entusiasmo por subir. Esto es lo bonito de la música y estoy tan acostumbrado a luchar por mis objetivos que me aburriría si el recorrido siempre fuera en línea recta.
Con Vaffanculo en el año 1993 te convertiste en el portavoz de los problemas de toda una generación. Hoy parece que las palabrotas no tienen aquel sentido y efecto para provocar ruptura en la música.
Creo que hoy, más que palabrotas, es necesario más sinceridad. Se necesita una voz serena que nos pueda explicar el camino a tomar desde un punto de vista social, existencial y político, ya que la política condiciona nuestro día a día. Creo que al final lo importante es creer en algo, tomar puntos de referencia precisos.
Especialmente en tus inicios, dabas la sensación de ser un cantautor sensible y atormentado. ¿Es así?
No sabría decir si soy sensible porque normalmente dejo a los que demás que sean los que juzguen mis virtudes y defectos. Atormentado no, siempre estuve seguro de las cosas que hice, de las cosas que dije, de mis denuncias en el mundo de la música. En los años ’90 representé a una generación que estaba viviendo un malestar general, que sentía la necesidad de desahogarse y con la música el desahogo es mejor. Me siento muy orgulloso de haber sido la voz de millones de personas: si contamos las copias vendidas, muchos compartieron en su momento mi filosofía de vida y mis ideas.
¿Sabes que te has convertido en todo un sex symbol con tu nuevo look?
No lo creo. La vida te cambia, te hace envejecer y, cuando esto ocurre, debes tratar de mantener un cierto tipo de forma física porque si no el tiempo te machaca. Practico deporte y me preocupo por lo que como para poder afrontar mucho mejor los conciertos y comunicar con el público joven que estoy descubriendo que me sigue. Creo que es lo correcto, llegar a potenciar la fuerza y la lucidez mental para poder confrontar con los más jóvenes y aprender de ellos.
En su momento declaraste que querrías ser padre.
He alcanzado muchos objetivos en la vida, excepto el de la paternidad, que comencé a sentir desde los años dos mil. Probablemente debería trabajar más en mí mismo. Lo primero que hay que hacer es llegar a vivir de una forma constante y equilibrada consigo mismo y regalar el amor que tienes a otra persona, para poder hacer una suma entre ambos. Ese es el único modo de que el resultado sea un hijo.
¿Tu verano será íntegramente laboral o te concederás unos días de vacaciones?
Será un verano lleno de trabajo. Estoy ya pensando en un proyecto para Navidad, que creo que es el momento más importante del año, cuando un regalo puede tener un valor diferente. Eres la primera persona en saberlo.
¿Será una recopilación de tus grandes éxitos?
Todavía no puedo anticipar nada, quiero que sea una sorpresa para los fans.
¿Y en Febrero te veremos de nuevo en el Festival de Sanremo?
No creo porque tengo el proyecto de hacer algo en el extranjero y creo que durante el año 2018 estaré involucrado en esto. En la vida nunca podemos decir nunca, pueden existir propuestas y situaciones que cambian en el último segundo, pero para ir a Sanremo se necesita una buena canción y una canción no se compone en un segundo. Así que, por ahora, no está en previsión.
Fuente: Il Giornale Off – Angela Lonardo
Fotografía: Diego Mondini